Redacción: Frida Sandoval
En el marco del Segundo Congreso de Negocios e Inversión del Cannabis, que se lleva a cabo en Playa Mujeres, se ha revelado una propuesta concreta para compensar la deforestación provocada por el Tren Maya en Quintana Roo. Dicha propuesta consiste en la siembra de cáñamo industrial, con el objetivo de regenerar los suelos y capturar bióxido de carbono, según lo anunciado por Lorena Beltrán, presidenta y fundadora del Congreso Cannabis Salud.
La propuesta ha sido presentada al Gobierno federal a través del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) y cuenta con el respaldo de fondos de inversión y activistas a favor del uso industrial, médico y recreativo del cannabis.
Beltrán explicó que la siembra de cáñamo industrial no requiere ninguna reforma legislativa, ya que esta especie posee una baja sustancia psicoactiva y su cultivo no está prohibido en México. Sin embargo, se necesitarían normas oficiales para regular su producción en usos específicos como la fabricación de papel, plásticos o materiales de construcción.
La activista también mencionó que, en lo que respecta a la legalización del cannabis para uso recreativo, no se vislumbra avances significativos durante el actual gobierno de Manuel López Obrador.
"En este sexenio, el tema se encuentra estancado. Aunque la senadora Olga Sánchez Cordero ha realizado esfuerzos importantes, como la aprobación de amparos para uso personal, generando jurisprudencia y liderando una propuesta de ley para regular el uso adulto con fines comerciales, esta propuesta se encuentra congelada en el Congreso desde el 2021 debido a cambios solicitados por los diputados. Esperamos que el próximo gobierno brinde un verdadero apoyo a esta industria emergente y en crecimiento", señaló Beltrán.
La propuesta de compensar la deforestación del Tren Maya con la siembra de cáñamo industrial busca no solo mitigar los impactos ambientales, sino también impulsar el desarrollo de una industria sostenible en México, aprovechando los beneficios del cannabis en diferentes sectores.
Se espera que esta propuesta sea considerada y discutida por las autoridades competentes, teniendo en cuenta tanto el impacto ambiental como las oportunidades económicas que podrían surgir de la regulación y aprovechamiento responsable del cannabis para usos industriales.