República Checa: Ciudadanía respalda cannabis medicinal según reciente encuesta

Redacción: Raquel García 

A pesar de la despenalización, la mayoría en República Checa solo respalda el cannabis terapéutico. Persiste el escepticismo sobre un mercado comercial amplio. 

Una encuesta realizada en República Checa antes de la aprobación de la reforma que despenaliza el cannabis revela un panorama complejo donde la mayoría ciudadana respalda el acceso terapéutico mediante receta, pero mantiene considerable escepticismo respecto a la regulación comercial amplificada. El sondeo investigó múltiples alternativas de política pública, desde legalización plena hasta opciones más restrictivas. La preferencia más extendida es mantener acceso exclusivamente terapéutico mediante receta, esquema ya vigente. Cuando se obliga a elegir una única opción, 36% opta por el acceso exclusivamente terapéutico, mientras aproximadamente 32% prefiere alguna apertura: 22% disponibilidad regulada en establecimientos licenciados y 10% legalización plena. En el extremo opuesto, 31% aboga mantener ilegalidad total y 10% endurecer sanciones. Solo 5% suavizaría penas actuales y 9% apoya el cultivo personal. 

La venta con control estatal en tiendas licenciadas genera divisiones: 45% a favor frente 43% en contra. Respecto al mercado regulado, predominan percepciones de riesgo donde 62% cree aumentarían usuarios y 47% prevé mayor carga policial. Solo 23% estima efecto social global positivo, frente 42% que visualiza un resultado negativo. Comparando riesgos de cannabis versus alcohol, más de 50% considera ambos riesgos comparables, pero la cuarta parte juzga al alcohol más riesgoso, mientras cerca de la quinta parte atribuye mayor riesgo al cannabis. Las opiniones negativas aumentan con la edad: los mayores de 65 años, casi la mitad (48%) consideran un impacto negativo versus 36% en el grupo de 15-24 años. 

La encuesta sugiere que la ciudadanía valida el uso terapéutico, pero requiere certezas sobre objetivos y herramientas para lograr un mercado regulado. Para que el debate avance, la discusión pública debe centrarse evidencia: demostración de la disminución mercado ilegal, protección a menores y garantía de acceso informado para adultos. República Checa ejecutará una reforma despenalizando para el consumo adulto desde el 1 de enero de 2026, permitiendo cultivar tres plantas, poseer 100 gramos en el hogar y 25 gramos en espacios públicos. Este contexto legislativo contrasta con la cautelosa opinión ciudadana, sugiriendo discrepancias entre reformas políticas y aceptación social. 

La reforma también autoriza uso terapéutico de la psilocibina, equiparándola con cannabis medicinal permitido desde 2013. El gobierno coordinó la legislación con expertos en salud pública, buscando equilibrio entre innovación política y realidades sociales. El rol participativo de la ciudadanía mediante encuestas refleja democracia deliberativa donde política pública emerge desde el diálogo entre legisladores y electores. La confianza institucional dependerá de la implementación efectiva: cumplimiento promesas de reducción del mercado negro, protección real a menores y acceso medicinal mejorado. Así República Checa se posiciona como laboratorio donde la legalización coexiste con la evaluación continua de la opinión pública, demostrando que reformas complejas requieren legitimidad social continua para una implementación exitosa.