Redacción Frida
Minnesota ha dado un paso significativo en la reforma de sus políticas sobre drogas. El gobernador demócrata, Tim Walz, firmó este martes un proyecto de ley que legaliza el uso recreativo de la marihuana. Con su aprobación, Minnesota se consolida como el estado número 23 de Estados Unidos en permitir el consumo recreativo de cannabis, siendo también el tercer estado del Medio Oeste en avanzar en esta dirección.
Durante la ceremonia de ratificación, Walz señaló los defectos de la prohibición: "La prohibición no funciona. Hemos criminalizado a demasiadas personas". Asimismo, remarcó el peligro que conlleva comprar cannabis en la calle y defendió que los adultos deberían tener autonomía para decidir sobre "este tipo de alternativas".
La legalización fue impulsada fuertemente por el bloque demócrata en la Cámara de Representantes y el Senado de Minnesota, y aprobada con apoyo bipartidista luego de intensos meses de revisión desde su introducción en enero. A partir del 1 de agosto, se permitirá a los residentes mayores de 21 años poseer hasta dos onzas (56 gramos) de marihuana en espacios públicos y hasta dos libras (907 gramos) en sus hogares. Una parte fundamental de esta legislación es la oportunidad de limpiar antecedentes a aquellos con condenas previas por marihuana, poniendo especial atención en los delitos de menor gravedad.
El proyecto de ley también establece la creación de una Oficina de Gestión de Cannabis que tendrá como función principal supervisar la regulación y venta de productos relacionados en el estado.
Zack Stephenson, representante estatal demócrata y patrocinador principal del proyecto, expresó su orgullo y satisfacción por el avance legislativo: "Este proyecto de ley crea un mercado seguro, bien regulado y prioriza un robusto programa de cancelación de antecedentes penales. Es tiempo de legalización".
Stephenson advirtió que, aunque la ley está a punto de entrar en vigor, la implementación de todos los cambios podría tardar. Se espera que los primeros dispensarios con licencia surjan en un plazo de 18 meses, y la eliminación completa de las numerosas condenas anteriores por cannabis podría extenderse durante varios años.
Esta legalización se suma a otras medidas progresistas recientes en Minnesota, como la restauración de derechos de voto para delincuentes condenados y la codificación del derecho al aborto en la legislación estatal.