Kelissa estrena sencillo y reafirma su visión del reggae moderno

Redacción: Carolina Herrera

Kelissa estrena “I Don't Even Know”, un sencillo espiritual e íntimo que refuerza su lugar en el reggae consciente. El tema destaca una mezcla de introspección y sus raíces jamaicanas.  

Kelissa acaba de sumar un capítulo importante a su proyecto musical con “I Don't Even Know”, un sencillo que salió a plataforma digitales el 2 de diciembre de 2025 y que se presentó como una pieza centrada en la introspección, la resiliencia y la gratitud.  

El tema llega en un momento donde la artista jamaicana continúa expandiendo su identidad dentro del reggae contemporáneo, manteniéndose fiel a sus raíces mientras sostiene un discurso que se aleja de lo superficial.  

Kelissa nació en y creció en St. Andrew, Jamaica, en una familia profundamente ligada al reggae. Sus padres, fueron vocalistas de la banda Chakula lo que la conectó día a día con la música. Desde pequeña participó en coros, tocó instrumentos y vivió rodeada de ensayos, lo que la acercó a una formación musical orgánica y muy ligada a la cultura rastafari.  

Con el tiempo, su desarrollo artístico tomó un rumbo global. Tras obtener una beca, estudió música en Estados Unidos, donde perfeccionó técnica vocal, percusión y procesos de producción. Más tarde se mudó a distintos países del continente africano, como Ghana, Etiopía y Tanzania, donde exploró ritmos tradicionales, cantos ceremoniales y estilo de danza locales. Esa etapa marcó su sello: un reggae que no se queda en la base clásica, sino que dialoga con raíces africanas y con influencias folk y espirituales.  

En su discografía previa, Kelissa ya había mostrado interés por combinar lo personal con lo social. Su EP “Spellbound” (2017) posicionó su nombre dentro de la escena independiente al apostar por letras reflexivas y una estética que evita caer en tendencias comerciales. Ese mismo espíritu aparece ahí en “I Don't Even Know”, pero con un enfoque más íntimo.  

El nuevo sencillo destaca por su producción sencilla y limpia, enfocada en solo la voz. No se busca sorprender con arreglos complejos, sino con honestidad y amor. La letra gira alrededor de la duda, el agradecimiento y ese sentimiento de no tener todas las respuestas, un estado común en proceso de cambio.  

Para Kalissa, este tema funciona como un recordatorio de que la fortaleza no siempre viene de saberlo todo, sino de mantenerse firme incluso en momentos de incertidumbre.  

En un panorama donde el reggae global a veces se inclina hacia sonidos comerciales, este lanzamiento vuelve a ubicar a Kelissa en el terreno del reggae espiritual, ese que aborda emociones, identidad y propósito.  

Con “I Don't Even Know”, la artista no sólo entrega una pista emotiva, sino una declaración de continuidad: seguir creando desde sus valores y desde una visión que mezcla raíces, historia y sensibilidad.