El humo del cannabis puede dañar gravemente la salud

Redacción: Dania Cruz  

El humo del cannabis

El fumar cannabis es la forma común de usar la planta, pero no precisamente en el área de la salud, se cuestiona si el humo del cannabis puede causar daños a la salud. Tener contacto frecuente con sustancias calientes en la boca, sin importar cuáles sean provocan pequeñas quemaduras en la mucosa bucal, pero con el tiempo estas pueden causar la aparición de manchas blanquecinas, lo que sucede, por ejemplo, al fumar con frecuencia o al usar dispositivos que alcanzan altas temperaturas ya que el calor constante daña la boca de manera repetida. 

En el caso de los cigarrillos de marihuana sin filtro, el contacto directo puede generar quemaduras en los labios, las cuales si se repiten podrían convertirse en lesiones persistentes, aunque estas afecciones suelen ser benignas su permanencia en el tiempo puede aumentar el riesgo de que se transformen en lesiones malignas. El humo del tabaco también produce quemaduras leves en la mucosa bucal, pero el filtro del cigarro reduce la temperatura del humo al llegar a la boca, mientras más largo sea el filtro ya sea en cigarrillos de tabaco o de marihuana mayor será la protección, en general los filtros de marihuana son más cortos por lo que reducen menos el calor, aunque si se ayudan evitar quemaduras directas o que el usuario inhale accidentalmente la brasa. La forma más segura de evitar los efectos dañinos del humo caliente es no recurrir a la combustión, optando por métodos alternativos como el uso de vaporizadores.  

Los subproductos generados por la combustión son de una de las principales causas de daño en la boca al fumar, estos pueden afectar tanto la mucosas como las encías provocando gingivitis e incluso los dientes ya que aumentan el riesgo de caries, los gases y compuestos tóxicos liberados al quemar cualquier sustancia ya sea tabaco o marihuana pueden provocar inflamación en la mucosa bucal, esta inflamación ocurre por el paso repetido del humo a través de la boca, tanto al inhalar como al exhalar. Además, estos efectos pueden extenderse a otras partes del sistema respiratorio incluyendo la tráquea, los bronquios y los pulmones, aunque el humo de la marihuana también puede afectar los pulmones, en general tiende a causar un menor daño comparado con el tabaco.  

La forma más adecuada para mantener la brasa alejada de la boca y reducir la temperatura del humo es utilizado algún objeto intermedio como una pipa, sin embargo, si está hecha de materiales que conducen el calor, como el metal puede aumentar la temperatura del humo y con ello el riesgo de daño es alto. Aunque las pipas ayudan a disminuir el calor, no elimina los subproductos tóxicos de la combustión, las pipas de agua por su parte enfrían el humo al pasar por el agua, pero tampoco filtran las sustancias nocivas.  

El propósito principal es evitar los microtraumatismos en la mucosa causados por el calor excesivo. No obstante, la única forma efectiva de prevenir los efectos de la combustión es optar por métodos alternativos de consumo que no impliquen quemar la sustancia.