Redacción Frida
Este miércoles, los Mossos d’Esquadra llevaron a cabo una operación en la que detuvieron a tres personas, dos hombres y una mujer, acusados de vender ilegalmente marihuana y hachís bajo el disfraz de Cannabidiol (CBD) en máquinas expendedoras. Estas máquinas estaban ubicadas en locutorios y bares de varios municipios de El Maresme, incluyendo lugares como Premià del Mar, Canet de Mar y Santa Susana. También se efectuó una redada en un establecimiento de la calle Concilio de Trento en Barcelona.
Los implicados lograban burlar la prohibición de venta de drogas camuflando sus actividades con el dispensado de cajas de CBD, una sustancia legal que contiene un 0,2% de THC, el componente psicoactivo de la marihuana. Durante el operativo, se precintaron tres máquinas expendedoras y se confiscaron 7.000 euros en efectivo y 1.000 cajas del presunto CBD. Aunado a esto, se realizaron 16 inspecciones en otros establecimientos, resultando en la detención temporal de 14 personas, responsables de los lugares donde se vendían las cajas.
La investigación comenzó el año pasado, tras la detección de un envío de cogollos de marihuana a una empresa perteneciente a los tres detenidos. Estos introducían la marihuana en cajetillas de tabaco, que luego se vendían en máquinas expendedoras, alquiladas a un tercero.
No es la primera vez que los Mossos d’Esquadra desmantelan negocios de este tipo. Ya han intervenido anteriormente en establecimientos que venden marihuana y hachís en máquinas expendedoras o tiendas de golosinas. Este método de venta ha llevado a Barcelona a triplicar las cifras de consumo en comparación con ciudades como Ámsterdam y a un aumento de rastros de cannabis en las aguas residuales.