El crecimiento del cannabis en Marruecos: solo con fines medicinales e industriales sigue prohibido

Redacción: Dania Cruz  

cannabis en Marruecos

Desde que Marruecos autorizó en 2021, el cultivo industrial de cannabis, el sector ha crecido en rapidez, en 2024 se otorgaron 2.372 licencias muy por encima de las 721 emitidas en 2023, sin embargo, el uso recreativo del cannabis sigue siendo ilegal y no está en discusión. Tres años después de iniciarse formalmente la industria legal del cannabis, Marruecos ha diversificado su producción, desde la extracción de CBD hasta la fabricación de cosméticos, suplementos alimenticios y la exportación de su variedad local, no obstante, el consumo recreativo continúa siendo tema tabú. Más allá del impulso económico, la legalización busca mejorar la calidad de vida de unas 60.000 familias de bajos recursos, históricamente vinculadas al cultivo legal de cannabis en el norte del país, aunque esta práctica aún persiste cada vez más agricultores migran hacia la producción regulada.  

Según la Agencia Nacional de Reglamentación de las Actividades Relativas al Cannabis ANRAC, la mayoría de las 3.371 licencias entregadas este año ha sido para cultivadores, el resto ha sido para actividades como procesamiento, comercialización, exportación, importación, transporte, manejo de viveros y más. La primera cooperativa local autorizada para transformar y exportar cannabis, desde su planta en Bad Berred en la región de Chauen su presidente Aziz Makhloug detalla que exportan resina con un nivel de THC inferior del 1% además de productos con CBD como aceites capilares y cremas, tanto para el mercado nacional como internacional.  

Makhlouf originario de la zona e hijo de un agricultor de cannabis, relata que comenzaron en 2023 con solo cinco agricultores y ahora ya son 200, la cooperativa ha exportado 350 kilos de resina, generando ingresos por casi 189.000 euros, y ha vendido más de 20.000 productos derivados, desde abril también tiene permiso para exportar resina de la variedad local con un contenido de THC superior al 1% que ha sido enviada a Suiza, Australia y Sudáfrica para uso farmacéutico. Makhlouf aboga por que el cannabis se utilice también en sectores como el textil o la construcción para aprovechar subproductos y residuos de la industria actual que aún no se procesan.  

El sector, aunque legal está fuertemente contralado por el Estado; el director general de ANRAC, Mohammed El Guerrouj destacó que incluso se ha destruido cargamento legal cuando cumplía con las normas, como desvíos en rutas autorizadas, también remarcó la creciente participación de agricultores en parte gracias al indulto real concedido en 2023 a más de 4.800 cultivadores procesados o condenados anteriormente. En 2024 se cultivaron legalmente 2.056 hectáreas, con una producción total de 4.198 toneladas, a pesar del progreso del sector las autoridades son firmes en su postura en el uso recreativo no está permitido ni se contempla.