Apuesta arriesgada: las grandes del cannabis confían en variedades polémicas

Redacción: Dania Cruz  

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La caída de los precios en Estados Unidos, sumada a la incertidumbre regulatoria y a la lentitud a la implementación de reformas, ha desacelerado el crecimiento del sector del cannabis, tras años de expansión acelerada la industria enfrenta ahora un escenario de ingresos estancados y presiones normativas constantes, que han colocado a las principales compañías del sector en una posición frágil. Aunque algunos mercados internacionales, como el alemán, ofrecen nuevas oportunidades de negocio es probable que solo un reducido grupo de operadores estadounidense se aventure a incursionar en ellos, en el corto plazo se prevé que el entusiasmo de los inversores se mantenga contenido, mientras las valoraciones bursátiles sigan desalineadas respecto a la realidad económica del sector. 

La recuperación lenta de ingresos y la persistente presión regulatoria han sumido a las grandes compañías del cannabis en una crisis prolongada, aunque mercados emergentes como el de Alemania ofrecen una nueva oportunidad.  

En 2021 el auge del cannabis parecía imparable, una encuesta publicada en la revista Addiction reveló que casi 18 millones de estadounidense consumían cannabis a diario, superando por primera vez a quienes bebían alcohol con la misma frecuencia, ese mismo año estado como Nueva York, Virginia, Connecticut y Nuevo México legalizaron el uso recreativo, mientras Alabama avanzó con su legalización médica.  

Pero las expectativas generadas por esas cifras no se han materializado, así lo demostraron en las conversaciones francas en una reciente cumbre del sector en el Barbican Centre de Londres, en cannabis Europa un evento donde se reunieron inversores, ejecutivos y banqueros quedo claro que los gobiernos conservadores están enfrentado la apertura de nuevos mercados recreativos, a esto se suman el elevado endeudamiento empresarial y los bajos múltiplos bursátiles, que siguen dificultando el crecimiento del sector. 

Esta situación también ha tenido un impacto significativo en los mercados bursátiles, las principales compañías del sector, entre ellas Curaleaf, Green Thumb, Tilray y Trulieve, acumulan actualmente una valoración conjunta de apenas 4.000 millones de dólares, según datos de LSEG, con un múltiplo promedio de ingresos futuros que apenas supera 1, de acuerdo con proyecciones de analistas recopiladas por el Visible Alpha, se espera que todas ellas registren pérdidas tanto ese año como el próximo. Uno de los desafíos estructurales del sector ha sido la sobreoferta generada tras los procesos de legalización en Estados Unidos y Canadá, esta liberalización acelerada derivó en una producción excesiva de cannabis, lo que a su vez provocó una caída pronunciada de precios en un entorno de competencia intensificada