Redactor: Sam Torne.
El pasado 8 de noviembre, la banda estadounidense de reggae SOJA (Soldiers of Jah Army) regresó a Argentina después de siete años, presentándose en el emblemático Estadio Obras Sanitarias de Buenos Aires. El concierto formó parte de la gira promocional de su álbum «Beauty In The Silence» (2021), con el cual obtuvieron su primer Grammy al Mejor Álbum de Reggae.
Desde su formación en 1997, SOJA ha sido una de las bandas más influyentes del reggae contemporáneo, fusionando elementos de rock, hip hop y pop. Su conexión con el público argentino es profunda, habiendo realizado presentaciones memorables en escenarios como el Personal Fest, el Microestadio Malvinas Argentinas y el Teatro Gran Rex.
La expectativa por su retorno era alta, y la banda no decepcionó. El show comenzó puntualmente a las 21:30 horas con «Not Done Yet», encendiendo de inmediato al público que no dejó de bailar y corear cada canción. La energía en el estadio era palpable, reflejando la buena vibra que caracteriza a SOJA.
Un repertorio que abrazó el pasado y el presente.
A lo largo de casi dos horas, la banda liderada por Jacob Hemphill ofreció un recorrido por su discografía, combinando temas de su último álbum con clásicos que los han consolidado como referentes del género. Canciones como «Born in Babylon», «You and Me» y «Here I Am» resonaron con fuerza, mientras que nuevas piezas de «Beauty In The Silence» fueron recibidas con entusiasmo.
Un momento destacado fue cuando Hemphill adaptó la letra de «Born in Babylon» a «Born in Argentina», desatando la euforia del público. Además, el trompetista Hellman Escorcia sorprendió al interpretar parte de «Rest of My Life» en español, fortaleciendo la conexión con la audiencia local.
La noche estuvo llena de sorpresas y homenajes. Durante la interpretación de «You Don't Know Me», la banda incorporó el icónico «Three Little Birds» de Bob Marley, rindiendo tributo al legendario artista y deleitando a los asistentes.
Otro momento memorable fue el solo de batería de Ryan «Bird» Berty, que demostró su virtuosismo y elevó la energía del estadio. La banda también transportó al público a los carnavales de Brasil al interpretar «Everything Changes», cuyo videoclip fue grabado en Río de Janeiro en 2013.
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