Redactor: Sam Torne
La postura de Kamala Harris respecto a la legalización de la marihuana ha sido uno de los temas más comentados durante su carrera política. Actualmente, como vicepresidenta de los Estados Unidos, Harris ha manifestado de forma clara su apoyo a la legalización del cannabis. Sin embargo, esta postura no ha sido constante a lo largo de su trayectoria. En su etapa como fiscal general de California, Harris fue una firme defensora de la aplicación de leyes contra el consumo de marihuana, lo que la llevó a criticar propuestas para su legalización en el pasado.
De la oposición al apoyo: un cambio de perspectiva
En 2010, Harris se opuso a la Proposición 19, una medida electoral en California que buscaba legalizar el cannabis recreativo. Durante esa época, se alineaba más con una visión de ley y orden que priorizaba la persecución de los delitos relacionados con las drogas. Esta postura fue criticada por figuras políticas como Tulsi Gabbard durante las elecciones primarias de 2019, quien destacó la aparente contradicción en la trayectoria de Harris al abordar temas relacionados con la marihuana.
Sin embargo, en 2016, Harris cambió su postura, mostrando una actitud más abierta hacia la legalización. En ese mismo año, apoyó la Proposición 64, que permitió la legalización de la marihuana recreativa en California. A partir de entonces, comenzó a abogar activamente por una reforma que incluyera la despenalización a nivel federal, algo que hasta la fecha sigue siendo un tema pendiente en la política estadounidense.
Su papel como senadora y vicepresidenta
Como senadora de California, Harris copatrocinó en 2019 la Ley de Justicia de la Marihuana, junto con el senador Cory Booker, con el objetivo de eliminar las restricciones federales sobre el cannabis y borrar los antecedentes penales de personas condenadas por delitos no violentos relacionados con esta sustancia. Esto fue un paso clave en su evolución hacia una postura más progresista sobre las políticas de drogas en el país.
Una vez asumió el cargo de vicepresidenta en 2020, Harris mantuvo su apoyo a la legalización de la marihuana. Sin embargo, su agenda sobre este tema ha sido menos ambiciosa de lo esperado debido a las limitaciones impuestas por la administración Biden, que ha priorizado otros temas. Aunque el presidente Biden ha mostrado apoyo hacia la despenalización del cannabis, la legalización completa sigue siendo un asunto delicado a nivel federal.
Uno de los principales argumentos de Harris para apoyar la legalización de la marihuana es su impacto desproporcionado en las comunidades afroamericanas e hispanas, que han sido las más afectadas por la criminalización del cannabis. La vicepresidenta ha resaltado en varias ocasiones cómo las leyes actuales han llevado a la encarcelación masiva de estas minorías, algo que, según ella, debe corregirse mediante la legalización y la eliminación de antecedentes penales relacionados con delitos no violentos de marihuana.
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