Redacción: Guicel Garrido

Un informe de Pregnancy Justice expuso que el caso penal más común que enfrentan las mujeres embarazadas en Estados Unidos es por el consumo de cannabis. Aunque se han hecho bastantes suposiciones al respecto, llegaron a la conclusión del porqué de dicha acción: muchos de los casos tienen relación con la reciente decisión de la corte suprema, en la que decidieron anular el fallo Roe Vs. Wade, que permitía la interrupción legal del embarazo.
Pregnancy Justice reportó 210 causas penales contra mujeres por conductas relacionadas con su embarazo.El 97% de los casos correspondió a acusaciones por consumo de sustancias; la organización aseguró que gran parte del porcentaje eran mujeres que estaba registradas como pacientes medicinales de cannabis, esto ocurrió en estados en los que existe una regulación respecto al uso del cannabis.
“Resulta significativo que, en ochenta y seis casos, la policía o la fiscalía alegaron que la acusada había consumido alguna forma de THC durante su embarazo, y en treinta y uno de esos ochenta y seis casos, la única prueba que apoyaba la acusación era el consumo de THC. Lo que es aún más sorprendente es que, en cinco de esos casos, el expediente judicial incluía declaraciones donde exponen que la acusada tenía una tarjeta de marihuana medicinal; lo cual justificaba su culpabilidad por tomar medicamentos recetados legalmente”, sostiene el informe. La organización denunció que, en la mayoría de los casos, las acusaciones contra mujeres embarazadas se basaban únicamente en la sospecha de daño al feto, sin necesidad de pruebas concretas.
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